
Con este truco casero conseguiremos dejar de ser acribillados por los mosquitos durante las noches de verano. El vinagre es el mejor repelente de estos molestos insectos, así que tan sólo hemos de rellenar pequeños cuencos con vinagre y repartirlos en las habitaciones , verás que en poco rato los ahuyentaremos, ya que no soportan el olor.
Más fácil imposible y nos permite ahorrarnos dinero en productos convencionales. ¡¡Probadlo y ya nos contareis!